jueves, 17 de noviembre de 2011

¡ESCLAVITUD YA!


Continúa la demostración de confianza de los mercados ante la más que probable llegada de Rajoy  a la Moncloa, y vuelven a hacerlo empujando a la prima de riesgo de la deuda española a un nuevo máximo histórico que, en este caso,  ha llegado a rozar los 500 puntos básicos frente al diferencial alemán.
 
El asedio no cesa, los especuladores, con la libertad que les han concedido los gobiernos irresponsables cegados por las promesas neoliberales, campan a sus anchas conduciendo a las economías del euro al abismo de la recesión y la deuda eterna.

Ante este panorama los especuladores tradicionales no pierden el paso y exigen  al futuro gobierno un marco de actuación despejado para llevar a cabo todas las trapacerías que consideren oportunas y así poder oprimir aún más a la ciudadanía en su propio beneficio. Hoy, Arturo Fernández, ha reclamado al próximo ejecutivo que tome "medidas muy duras al día siguiente" de las elecciones, como si no resultasen bastante duras, e ineficaces, las reformas ya adoptadas a lo largo de los últimos meses.


En otro foro el vicepresidente de la CEOE y presidente de la patronal del Metal (Confemetal), Javier Ferrer, ha propuesto recuperar la figura del aprendiz, con un sueldo inferior al Salario Mínimo Interprofesional (SMI) hasta que acabe el periodo de formación y se incorpore definitivamente a la empresa.

En una entrevista con Efe, Ferrer ha reconocido que puede ser criticado por este planteamiento, pero ha afirmado que el SMI (641,4 euros al mes) «evita» que los jóvenes, cuya tasa de paro está en el 48%, puedan acceder a un primer trabajo.

Si resulta inmoral que se pretenda hacer vivir a la gente con un salario mínimo de 641,4 euros al mes, es absolutamente impresentable proponer que por una jornada completa de trabajo se ganen 300 euros.

El salario a percibir por una jornada completa de trabajo es imprescindible que permita vivir con dignidad al trabajador, todo lo que no sea así es atentar contra la dignidad humana. La situación a la que nos han conducido los partidos proneoliberales, PP, PSOE, CiU y PNV, está produciendo las mayores diferencias sociales en muchísimos años, generando un nivel de pobreza similar al de la posguerra que, además, está creciendo a una velocidad de vértigo.

Deberá tener mucho tino el próximo gobierno si no quiere encontrar a millones de personas constantemente en las calles que, con el cariz que esta tomando la situación, no solo se dedicarán a protestar.

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